Tenía un sueño, un deseo, un anhelo, da igual como lo llamemos...una cosa tan simple como ir a una tienda, tomar un disco, pagarlo en la caja, desembalarlo, escucharlo y ponerme a leer el booklet. Y también ir al concierto. Lo que no es tan fácil si eres checa, tu cantante favorito es madrileño y casi no toca fuera de España, y en el caso de que sí, se trata de Argentina.
Aunque ya durante mis estudios de español me interesaba saber qué escuchaban los españoles en realidad (no creo solo "en" Shakira, Enrique Iglesias y flamenco) y lo buscaba con intención, a Leiva lo encontré por casualidad, el 18 de febrero de 2012, gracias a la película de Achero Mañas "Todo lo que tú quieras", y lo tenía solo por un compositor de bandas sonoras. Después de un estudio más detallado "se convirtió" en cantante, tras la desintegración de su grupo Pereza, haciendo carrera en solitario. Aquel febrero de 2012 fue crucial para mí. El español, cuya forma universitaria de aprenderlo abandoné con desilusión, tuvo una segunda oportunidad y un método de enseñanza un poco más rock&roll (y mucho más divertido)...
ENERO 2013
Cuando Leiva anunció que estaba finalizando su segundo disco, se me ocurrió no perder una oportunidad así. Solo hacía falta solucionar un problemilla - ¿cómo poder estar en Madrid un tiempo más largo y sin declararme en bancarrota? Bueno, podría:
1) robar un banco (pero para esto tendría que reunir mucho valor y experiencia y de todos modos fracasaría en el momento en que como una chica cortés y decente anunciara a la señora detrás de la ventanilla: "Disculpe, ¿le importaría si yo le pidiera que me ponga todo el efectivo aquí en esta bolsa? Y por favor, discretamente si es posible. Muchas gracias.")
2) enrollarme con Cristiano Ronaldo (en aquella época tenía debilidad por las mujeres de origen eslavo; desgraciadamente en ese momento salía con una, además tampoco puedo presumir de las medidas de una modelo)
3) ganar la lotería (estadísticamente muy improbable)
4) buscar un trabajo en Madrid (en la época de la crisis económica, cuando España estaba atormentada por un paro de récord, esta posibilidad no entraba en consideración; además perdería el estado ventajoso de estudiante).
Un momento...¿dejar los estudios? Claro, jajaja. Podría echar un vistazo a la web de mi uni, por si ofrecen alguna estancia de estudio en el extranjero. Las páginas en la sección Erasmus anunciaban lo siguiente:
El Departamento de Pedagogía tiene cerrado contratos para la movilidad de estudiantes con las siguientes universidades:
Universidad Jaguelónica de Cracovia (Polonia)
Universidad Comenius de Bratislava (Eslovaquia)
Universidad de Prešov (Eslovaquia)
Universidad de Maribor (Eslovenia)
Universidad de Santiago de Compostela (España)
Universidad Complutense de Madrid (España)
Madrid. Erasmus. Yo. Yo que desde pequeña odio los eventos organizados por otros de tipo excursiones escolares, cursos de esquí o de natación obligatorios, un montón de gente junta, dormir fuera de mi cama más de dos noches y el inglés. Ya una vez -todavía durante los estudios en Liberec- me insistieron que saliera del país y me costó muchísimo escaquearme. ¡¿Y ahora sería una estudiante de Erasmus voluntariamente?! Cerré la página pensando qué medias negras de "hacheeme" sacrificaré, en qué juguetería me procuraré alguna pistola de plástico y cómo lo más creíblemente posible gritaré "¡Dame la pasta, por favor!" En todo el universo fui la única que sabía sobre esta oportunidad "erasmusa" para mí. No obstante, también esto es demasiado si con esa persona paso 24 horas al día. Sé mentir a todos, pero a mí, no. Lo único que me podría salvar sería perder el deadline.
FEBRERO 2013
Mientras todos los demás se afanarían en hacer lo imposible, rogarían o sobornarían, yo escribí a la coordinadora un email diciendo que solo necesitaba asegurarme de que ya era tarde para inscribirme a la estancia eventual de estudio en España para el año académico 2013/2014 (entendéis, CLARO QUE YO IRÍA pero las circunstancias están contra mí, ay, pobrecita). Su respuesta no me alegró - el concurso se cerrará dentro de un mes y ella me apunta. Bueno, entonces de otro modo. Supongo que para Erasmus es crucial el inglés, lo que yo ya no domino tanto y, sobre todo, lo odio en cuerpo y alma a diferencia del español. La traición número dos - al contrario, dice que el español será mi gran ventaja. ¡Cojones! Pero todavía no voy a darme por vencida. De Erasmus se van los estudiantes de veinte años de diplomatura, yo soy ya mayor y estudio la licenciatura. Cuando me anuncia que justo los de la licenciatura son enviados con preferencia, casi me desmayé. Contra mí estaban también los resultados - aunque en el instituto "coleccionaba" suficientes, ahora en mi boletín de notas tenía un sobresaliente, o sea, la media de estudio era "1,0". ¡Dios! Mi última esperanza posible: elegirán a otro. Por desgracia, de todos los estudiantes nos inscribimos dos. Y la segunda candidata quería ir a Santiago de Compostela...y yo ya estaba jodida. Me preguntaron por el cuatrimestre - podía elegir entre el invierno 2013 o verano 2014. Para tener bastante tiempo para prepararme psíquicamente pedí, naturalmente, el de verano. Y además, planeé para abril de 2013 una excursión de fin de semana a Madrid con la intención de examinar todo con antelación y eventualmente retroceder a tiempo (¡aunque tuviera que romperme la pierna!)
MARZO 2013
Mientras, en la Elle española salió la entrevista con ese cantante mío. Recorrí muchos estancos de Praga, pero en ninguno tenían la revista. Cuando un día, por pura casualidad, llegué a Praga un poco antes, como había lluvia y frío fui a calentarme a Neoluxor (*explico: cadena de librerías, versión checa de Casa del Libro). Aunque siempre me dirijo justo al segundo sótano, donde hay un rincón con libros de texto españoles, por pura casualidad esta vez pasé por el primer sótano. Y allí, por pura casualidad, encontré ese número de Elle, además se trataba del único ejemplar. Lo agarré y ceremoniosamente caminé con él a la caja, sin reparos escuché "289 coronas, por favor" (*explico: casi 10 euros, en España se vende por 3,50 euros), sin protesta lo pagué y corría a la uni, donde lo escondí bajo el pupitre y me puse a leer a hurtadillas. Incluso hoy en día me acuerdo de cómo esperaba el fin de la clase para poder ponerme en Youtube alguna "Y sin embargo" de Joaquín Sabina, la que Leiva nombró como la canción más hermosa que está escrita en castellano. No obstante, en la entrevista fue mencionada también una cosa más. Cito: "...y (el disco) saldrá después del verano". Ehm. Si sale a la venta en septiembre/octubre, calculo que la gira podría empezar en noviembre/diciembre, como máximo en enero y yo entonces perdería el tiempo en Madrid desde febrero de 2014 absolutamente en vano. La vida es cambio. Pues, fui al departamento a pedir el cambio del cuatrimestre. Como ya he mencionado, excepto a mí, soy capaz de mentir a todos, así que a la coordinadora se lo razoné con el tema de mi tesis. Es decir, "como en Madrid pienso dedicarme a la comparación del sistema educativo de España con el de la República Checa (claro, algún día por esta disimulación espero el Óscar) sería oportuno residir y estudiar allí paralelamente con el año escolar". Por esta idea fui alabada y trasladada al cuatrimestre de invierno con la salida a principios de septiembre.
ABRIL 2013
En compañía de mi prima me encontré durante cuatro días por primera vez en Madrid. A ella, una turista típica, la planté en el Prado mientras yo recorría todos los lugares que conocía de las canciones y entrevistas. En lugar del Palacio real TENÍA QUE VER el Palacio Vistalegre (=allí Leiva y Rubén, los chicos de Pereza, dieron su último concierto), en lugar del Templo de Debod vi el Templo de Susu (=una tienda de segunda mano en el barrio Malasaña donde a Leiva le gusta comprar la ropa), en lugar del triángulo Prado - Reina Sofía - Thyssen-Bornemisza, eventualmente CaixaForum vi La Riviera - El Sol - El Siroco y La Galileo (=las salas de conciertos míticas), en lugar de la calle Mayor fui a la de Estrella Polar (=por si acaso tuviera algo que ver con la estrofa "A la Avenida de la Estrella Polar llega primero el invierno...") y a la Montera (=porque "...te recordaba en la calle Montera, colgado de una pantera..."), en lugar del Santiago Bernabéu vi el Calderón (=porque "Eme, cuando te meta un gol voy a ser un killer que todo el Calderón me lo chille".). En lugar de un jamón ibérico y un llavero en forma de oso o toro me llevé la maleta llena de discos. De Madrid me enamoré hasta los huesos y no sabía imaginar cómo lograría esperar cinco meses a la vuelta.
JUNIO 2013
Hice una escapada secreta a Madrid, podéis leer más sobre ella en el megaemail n° 15.
SEPTIEMBRE 2013
Sin embargo, antes de irme a Madrid, me esperaba una despedida triste. Durante mis estudios frecuentaba un hogar escolar en una escuela primaria para hacer las prácticas. Y porque este trabajo lo adoraba y con mi "jefa", la señora Kristýna Dostálová, formaba un buen equipo y llegamos a ser grandes amigas, yo sabía que por eso sería incluso más difícil. Nos prometimos la una a la otra, con lágrimas en los ojos, que mantendríamos el contacto a través del correo electrónico. "Escríbeme siempre que sea posible y saques un hueco y ganas", fue su frase, y fue la que cerró un capítulo checo de mi vida y que abrió uno español. Y así en lugar de mi proyecto final de estudios nació OTRO.
En este blog publico después de diez años aquellos emails, por su longitud bautizados como "megaemails", que más o menos cada semana le enviaba a la señora Dostálová y que, en esencia, a manera de diario resumen mi camino hacia un sueño durante 150 días desde septiembre 2013 hasta el último día de enero de 2014. ¡Pero ojo!
No se trata del típico "Querido diario" de las chicas adolescentes. ES OTRO DIARIO.
No es una descripción de los encantos de Madrid al estilo de las guías corrientes. ES OTRO MADRID.
No es una estancia de estudios típica, llena de conocer a gente de todo el mundo, de viajar por España en grupo y con la bandera "I*ESN", de ir (mucho) a emborracharse a las fiestas y estudiar (poco). ES OTRO ERASMUS...
Kristýna
PD. Dedicado a Miguel, mi mejor profesor de español (¡Perdona, Cervantes! ¡Gracias, Leiva! :-))
Aunque ya durante mis estudios de español me interesaba saber qué escuchaban los españoles en realidad (no creo solo "en" Shakira, Enrique Iglesias y flamenco) y lo buscaba con intención, a Leiva lo encontré por casualidad, el 18 de febrero de 2012, gracias a la película de Achero Mañas "Todo lo que tú quieras", y lo tenía solo por un compositor de bandas sonoras. Después de un estudio más detallado "se convirtió" en cantante, tras la desintegración de su grupo Pereza, haciendo carrera en solitario. Aquel febrero de 2012 fue crucial para mí. El español, cuya forma universitaria de aprenderlo abandoné con desilusión, tuvo una segunda oportunidad y un método de enseñanza un poco más rock&roll (y mucho más divertido)...
ENERO 2013
Cuando Leiva anunció que estaba finalizando su segundo disco, se me ocurrió no perder una oportunidad así. Solo hacía falta solucionar un problemilla - ¿cómo poder estar en Madrid un tiempo más largo y sin declararme en bancarrota? Bueno, podría:
1) robar un banco (pero para esto tendría que reunir mucho valor y experiencia y de todos modos fracasaría en el momento en que como una chica cortés y decente anunciara a la señora detrás de la ventanilla: "Disculpe, ¿le importaría si yo le pidiera que me ponga todo el efectivo aquí en esta bolsa? Y por favor, discretamente si es posible. Muchas gracias.")
2) enrollarme con Cristiano Ronaldo (en aquella época tenía debilidad por las mujeres de origen eslavo; desgraciadamente en ese momento salía con una, además tampoco puedo presumir de las medidas de una modelo)
3) ganar la lotería (estadísticamente muy improbable)
4) buscar un trabajo en Madrid (en la época de la crisis económica, cuando España estaba atormentada por un paro de récord, esta posibilidad no entraba en consideración; además perdería el estado ventajoso de estudiante).
Un momento...¿dejar los estudios? Claro, jajaja. Podría echar un vistazo a la web de mi uni, por si ofrecen alguna estancia de estudio en el extranjero. Las páginas en la sección Erasmus anunciaban lo siguiente:
El Departamento de Pedagogía tiene cerrado contratos para la movilidad de estudiantes con las siguientes universidades:
Universidad Jaguelónica de Cracovia (Polonia)
Universidad Comenius de Bratislava (Eslovaquia)
Universidad de Prešov (Eslovaquia)
Universidad de Maribor (Eslovenia)
Universidad de Santiago de Compostela (España)
Universidad Complutense de Madrid (España)
Madrid. Erasmus. Yo. Yo que desde pequeña odio los eventos organizados por otros de tipo excursiones escolares, cursos de esquí o de natación obligatorios, un montón de gente junta, dormir fuera de mi cama más de dos noches y el inglés. Ya una vez -todavía durante los estudios en Liberec- me insistieron que saliera del país y me costó muchísimo escaquearme. ¡¿Y ahora sería una estudiante de Erasmus voluntariamente?! Cerré la página pensando qué medias negras de "hacheeme" sacrificaré, en qué juguetería me procuraré alguna pistola de plástico y cómo lo más creíblemente posible gritaré "¡Dame la pasta, por favor!" En todo el universo fui la única que sabía sobre esta oportunidad "erasmusa" para mí. No obstante, también esto es demasiado si con esa persona paso 24 horas al día. Sé mentir a todos, pero a mí, no. Lo único que me podría salvar sería perder el deadline.
FEBRERO 2013
Mientras todos los demás se afanarían en hacer lo imposible, rogarían o sobornarían, yo escribí a la coordinadora un email diciendo que solo necesitaba asegurarme de que ya era tarde para inscribirme a la estancia eventual de estudio en España para el año académico 2013/2014 (entendéis, CLARO QUE YO IRÍA pero las circunstancias están contra mí, ay, pobrecita). Su respuesta no me alegró - el concurso se cerrará dentro de un mes y ella me apunta. Bueno, entonces de otro modo. Supongo que para Erasmus es crucial el inglés, lo que yo ya no domino tanto y, sobre todo, lo odio en cuerpo y alma a diferencia del español. La traición número dos - al contrario, dice que el español será mi gran ventaja. ¡Cojones! Pero todavía no voy a darme por vencida. De Erasmus se van los estudiantes de veinte años de diplomatura, yo soy ya mayor y estudio la licenciatura. Cuando me anuncia que justo los de la licenciatura son enviados con preferencia, casi me desmayé. Contra mí estaban también los resultados - aunque en el instituto "coleccionaba" suficientes, ahora en mi boletín de notas tenía un sobresaliente, o sea, la media de estudio era "1,0". ¡Dios! Mi última esperanza posible: elegirán a otro. Por desgracia, de todos los estudiantes nos inscribimos dos. Y la segunda candidata quería ir a Santiago de Compostela...y yo ya estaba jodida. Me preguntaron por el cuatrimestre - podía elegir entre el invierno 2013 o verano 2014. Para tener bastante tiempo para prepararme psíquicamente pedí, naturalmente, el de verano. Y además, planeé para abril de 2013 una excursión de fin de semana a Madrid con la intención de examinar todo con antelación y eventualmente retroceder a tiempo (¡aunque tuviera que romperme la pierna!)
MARZO 2013
Mientras, en la Elle española salió la entrevista con ese cantante mío. Recorrí muchos estancos de Praga, pero en ninguno tenían la revista. Cuando un día, por pura casualidad, llegué a Praga un poco antes, como había lluvia y frío fui a calentarme a Neoluxor (*explico: cadena de librerías, versión checa de Casa del Libro). Aunque siempre me dirijo justo al segundo sótano, donde hay un rincón con libros de texto españoles, por pura casualidad esta vez pasé por el primer sótano. Y allí, por pura casualidad, encontré ese número de Elle, además se trataba del único ejemplar. Lo agarré y ceremoniosamente caminé con él a la caja, sin reparos escuché "289 coronas, por favor" (*explico: casi 10 euros, en España se vende por 3,50 euros), sin protesta lo pagué y corría a la uni, donde lo escondí bajo el pupitre y me puse a leer a hurtadillas. Incluso hoy en día me acuerdo de cómo esperaba el fin de la clase para poder ponerme en Youtube alguna "Y sin embargo" de Joaquín Sabina, la que Leiva nombró como la canción más hermosa que está escrita en castellano. No obstante, en la entrevista fue mencionada también una cosa más. Cito: "...y (el disco) saldrá después del verano". Ehm. Si sale a la venta en septiembre/octubre, calculo que la gira podría empezar en noviembre/diciembre, como máximo en enero y yo entonces perdería el tiempo en Madrid desde febrero de 2014 absolutamente en vano. La vida es cambio. Pues, fui al departamento a pedir el cambio del cuatrimestre. Como ya he mencionado, excepto a mí, soy capaz de mentir a todos, así que a la coordinadora se lo razoné con el tema de mi tesis. Es decir, "como en Madrid pienso dedicarme a la comparación del sistema educativo de España con el de la República Checa (claro, algún día por esta disimulación espero el Óscar) sería oportuno residir y estudiar allí paralelamente con el año escolar". Por esta idea fui alabada y trasladada al cuatrimestre de invierno con la salida a principios de septiembre.
ABRIL 2013
En compañía de mi prima me encontré durante cuatro días por primera vez en Madrid. A ella, una turista típica, la planté en el Prado mientras yo recorría todos los lugares que conocía de las canciones y entrevistas. En lugar del Palacio real TENÍA QUE VER el Palacio Vistalegre (=allí Leiva y Rubén, los chicos de Pereza, dieron su último concierto), en lugar del Templo de Debod vi el Templo de Susu (=una tienda de segunda mano en el barrio Malasaña donde a Leiva le gusta comprar la ropa), en lugar del triángulo Prado - Reina Sofía - Thyssen-Bornemisza, eventualmente CaixaForum vi La Riviera - El Sol - El Siroco y La Galileo (=las salas de conciertos míticas), en lugar de la calle Mayor fui a la de Estrella Polar (=por si acaso tuviera algo que ver con la estrofa "A la Avenida de la Estrella Polar llega primero el invierno...") y a la Montera (=porque "...te recordaba en la calle Montera, colgado de una pantera..."), en lugar del Santiago Bernabéu vi el Calderón (=porque "Eme, cuando te meta un gol voy a ser un killer que todo el Calderón me lo chille".). En lugar de un jamón ibérico y un llavero en forma de oso o toro me llevé la maleta llena de discos. De Madrid me enamoré hasta los huesos y no sabía imaginar cómo lograría esperar cinco meses a la vuelta.
JUNIO 2013
Hice una escapada secreta a Madrid, podéis leer más sobre ella en el megaemail n° 15.
SEPTIEMBRE 2013
Sin embargo, antes de irme a Madrid, me esperaba una despedida triste. Durante mis estudios frecuentaba un hogar escolar en una escuela primaria para hacer las prácticas. Y porque este trabajo lo adoraba y con mi "jefa", la señora Kristýna Dostálová, formaba un buen equipo y llegamos a ser grandes amigas, yo sabía que por eso sería incluso más difícil. Nos prometimos la una a la otra, con lágrimas en los ojos, que mantendríamos el contacto a través del correo electrónico. "Escríbeme siempre que sea posible y saques un hueco y ganas", fue su frase, y fue la que cerró un capítulo checo de mi vida y que abrió uno español. Y así en lugar de mi proyecto final de estudios nació OTRO.
En este blog publico después de diez años aquellos emails, por su longitud bautizados como "megaemails", que más o menos cada semana le enviaba a la señora Dostálová y que, en esencia, a manera de diario resumen mi camino hacia un sueño durante 150 días desde septiembre 2013 hasta el último día de enero de 2014. ¡Pero ojo!
No se trata del típico "Querido diario" de las chicas adolescentes. ES OTRO DIARIO.
No es una descripción de los encantos de Madrid al estilo de las guías corrientes. ES OTRO MADRID.
No es una estancia de estudios típica, llena de conocer a gente de todo el mundo, de viajar por España en grupo y con la bandera "I*ESN", de ir (mucho) a emborracharse a las fiestas y estudiar (poco). ES OTRO ERASMUS...
Kristýna
PD. Dedicado a Miguel, mi mejor profesor de español (¡Perdona, Cervantes! ¡Gracias, Leiva! :-))
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