En el marco de acortar el retraso acumulado me ahorro la introducción melodramática que merecería el megaemail de aniversario número 10. Pero la realidad es que no se me ocurre nada divertido o, por lo menos, aceptable. ¡Qué horror! Adonde he llegado... Bueno, pero vamos a ver, por lo menos, qué viví durante ese tiempo.
el martes 22 de octubre:
Recupero el sueño de cuatro días anteriores y me despierto en un día lluvioso y frío. Me digo que no pasa nada, que hace falta conocer y aprender a respetar Madrid también en este tiempo. Además, por fin, puedo "estrenar" mi paraguas nuevo y mis zapatos nuevos. Por eso también rechazo el metro y salgo andando. Le diré a usted, los zapatos han probado sus capacidades con una nota sobresaliente, en cambio, el paraguas no lució demasiado. Debería ser más ancho que alto y por ese plástico transparente veo igual que por las gafas de Inma con cuatro dioptrías que me probé cuando las dejó el otro día en el lavabo. A la escuela, ay, quiero decir, a la uni... pues, no, empezaré a escribir "a la facultad" porque luego automáticamente utilizo la palabra "escuela" también en español y las chicas se reían de mí que aquí se utiliza solo para la primaria. O sea, a la facultad llego un poco mojada, ya que llovió durante todo el camino: eso le pasa cuando uno tiene la necesidad recorrer la mitad de Madrid sin mirar el tiempo y además llamarlo "conocer la ciudad desde otro punto de vista". Bueno, con ese paraguas tendré que trabar amistad un poco más. Pero en la escuela, ¡no! en la facultad quiero decir, hostia Horská, recuérdalo ya, por fin: en la facultad, en la facultad, en la facultad (sí, ya quizá va a funcionar), en la facultad hace un frío que pela, en particular en la primera clase me hielo de tal manera que de eso no puedo salir sana. ¡Yo que para la estancia en Madrid me preparo ejemplarmente con vitamina C y con Echinacea, no me afecta ninguna cerveza, ningún concierto ni la vuelta de él y ¿¿¿yo luego me constipo debido a la jodida escuela??? Es decir, facultad. ¡Maldita sea! Además, en la clase trabajamos con algunos papeles que de algún modo debía evidentemente conseguir en algún lugar la semana pasada. Así que cuando al final de la clase pregunto por ellos, me dicen que puedo dirigirme a la planta baja de la FACULTAD y allí, en el centro reprográfico, por unos euros hacer imprimir aquellos documentos. ¡Ay, Dios! ¡Pero qué coñazo es esta escuela, que, de hecho, es la FACULTAD. No niego que hoy estoy bastante malhumorada – intento convencerme a mí misma de que no me importa nada que Leiva posponga ese disco, que es guay corretear por un Madrid lluvioso, que las clases me gustan y que no tengo frío en absoluto. Y también... no puedo decir que echaría de menos, mejor dicho me molestan esos cambios o adaptación: tendré una visita aquí/tengo una visita/ya estoy aquí sola otra vez. Ay. Esa segunda clase tampoco me apasiona, sobre todo cuando faltan las chicas que suelen sentarse detrás de mí y más cuando llego a saber que tenemos encargados otros deberes, otra vez alguna lectura. Y terminamos a las seis en punto, justo hoy, cuando tengo tanta prisa – de qué va: por la tarde, cuando en la web me compré la entrada para mi primer descubrimiento madrileño, el grupo LA M.O.D.A, me fijé en la información en el Twitter que Quique González (sí, ese amigo que acaba de cumplir cuarenta años de Leiva, en checo "Jindra", a cuyo concierto voy en diciembre junto con Inma) tiene la firma de su nuevo disco desde las 18:30 en la FNAC. Por el disco no me intereso tanto porque es una compilación compuesta por su último disco, y además con su versión demo y una grabación del concierto, o sea, tres discos. Igualmente dejo de tener ganas de la firma cuando me acuerdo de esa cola de varias plantas en septiembre para Andrés Calamaro. Pero lo tomo solo como una ocasión de ver a Quique antes de Navidad. Cuando salgo corriendo desde la facultad con el móvil en la mano, me entero leyendo que el evento se aplaza a las 19, además dejó de llover, entonces tomar el metro sería un pecado. Así que salgo con rumbo al centro pensando que ya se verá. ¡Y cómo se veía! En la FNAC estoy a eso de las siete menos cuarto (simplemente ya sé cuál de las rutas es la más rápida :-)) y al final aquella compilación me la compro porque de todos modos su último disco todavía no lo tengo y este no es mucho más caro. Decide el hecho de que quiero intentar conseguir esa firma y a la vez no quiero presentarle álbumes más viejos. Después de pagar el disco salgo corriendo fuera de la tienda y me pongo en la cola. Determino el límite de las 21 horas, luego paso de eso. La cola se mueve bastante rápido lo que lo atribuyo al hecho de que ya por fin empezaron a dejar entrar - o arriba a las escaleras, si Quique firma allí donde Andrés Calamaro, o a la sala donde suelen tener lugar conciertos y presentaciones semejantes. Al esperar, mola como los españoles que pasan por allí se acercan preguntando: "¿Para quién se hace cola hoy?" y después de nuestra respuesta se nota que o no tienen ni idea de quién se trata o se van corriendo por el disco a la tienda y "hop" ponerse detrás de nosotros. :-) Acercándome a la puerta de entrada veo que dejan pasar solo uno por uno, entonces se me ocurre que probablemente registren bolsos o DNI, pues empiezo a prepararlo. Sin embargo, cuando llego hasta la puerta, averiguo que la realidad es otra. La guardia deja pasar uno por uno por una razón simple - Quique está justo abajo en la información y ya se firma y posa. O sea, ni media hora de esperar hasta ahora y, de buenas a primeras, ¡Quique delante de mí! Y todo sucede al estilo español cálido. Así que mientras que todo el mundo tiene una sonrisa en la cara y visiblemente disfruta de que tiene a su ídolo al alcance, yo paso los dos últimos minutos -además, turbada por esa prisa- con una repetición persistente "BesoHaciaLaIzquierdaBesoHaciaLaDerechaNoLoJodas,BesoHaciaLaIzquierdaBesoHaciaLaDerechaNoLoJodas,BesoHaciaLaIzquierdaBesoHaciaLaDerechaNoLoJodas". Bueno, y luego llegó ese momento. Quique se despidió de un chico que estaba delante de mí y me tocó a mí. Y yo di tres pasos hacia él sin perder de vista su mejilla izquierda en la que le marqué el beso, lo repetí en la derecha, sentí un alivio triunfal y por fin ahora le miré a los ojos. Sin embargo, no espere usted alguna declaración conmovedora de tipo Y se me doblaron las rodillas, me olvidé de Leiva y me enamoré de Quique. Aunque, en cuanto un hombre tiene cuarenta y más ...pero eso no pertenece a este email :-)). Es que todavía era necesario concentrarse en decir sin fallo: "¿Me puedes firmar el disco, por favor?" Ya estaba a punto de inspirar, pero Quique fue más listo que yo. Simplemente notó mi bolso, sí, ese de vinilo, y empezó a decir cómo molaba y que le encantaba. O sea, yo, sin planearlo, tuve que incluir delante de mi frase preparada por lo menos "Gracias". Pero luego ya le metí ese disco con aquel ruego y él dijo que "por supuesto que sí". No obstante, en los casos así mi conversación no termina sino que empieza porque los artistas aquí exigen el nombre. Y el mío como usted sabe -y Quique ya ahora también- se escribe con "K" a consecuencia de lo que no paró de charlar y quería saber de dónde era, así que respondí ásperamente que de la República Checa, ya que tenía que controlar otra cosa a la que se acercaba con el movimiento de la mano: "...y después de T se escribe Y con el acento, por favor, no, después de R no, eso está bien, sí, aquí, después de esta T, genial, eso es, bien, y además esa coma encima, sí. Uf." Acabé diciendo "Muchas gracias." y él "¡A ti!" Wooooow. Cuando salí de la FNAC y me dirigí hacia el piso caí en la cuenta de todo: yo tengo un disco firmado por Quique incluso la dedicatoria, un bolso alabado y, por fin, tengo en mi lista al primer español al que saludé de modo correcto. ¡Esto es para un himno! Eso no está a mi disposición, pero la panadería sí, así que lo celebro con una palmera. Pero ya debería acabar con ellas también. Después de llegar a casa me jacto a todo el Facebook de cómo de geniales son las firmas locales. Luego leo un email de la embajada checa diciendo que recibieron bien mi carné electoral y me divierto leyendo en la web la información de que el escultor David Černý creó en el Moldava un dedo medio flotante apuntado al Castillo :-) (*explico: mi adorado escultor checo, cuya obra produce controversía, por ejemplo El tanque pintado de rosa, La estatua de San Venceslao, Los bebés en la Torre de televisión de Žižkov o en el parque Kampa en Praga, Entropa, La Cabeza de Franz Kafka etc. Esta vez creó un enorme dedo medio en la superficie de Moldava que expresa su desacuerdo y protesta con la política del presidente checo, Miloš Zeman). Toda la melancolía desapareció. Me alegro de estar en Madrid. Y aunque es por Leiva, hoy el agradecimiento pertenece a Quique.
el miércoles 23 de octubre:
Duermo a tope y disfruto, de que por motivos de la huelga, no tenemos clases. El día de hoy lo consagro a la limpieza general - quito el polvo, barro, friego el suelo y, sobre todo, limpio la pared. Es que debajo de la mesa logré desgastar a patadas la pared, hay en ella manchas negras notables y qué hacer con eso, ¿eh? Pues, ¡ojo!, no solo leo "Žena a život"/Mujer Hoy, sino que de vez en cuando veo "Sama doma"/"Sola en casa" (*explico: un programa de la televisión pública destinado, sobre todo, a las mujeres, se dedica a los asuntos familiares, las presentadoras entrevistan a médicos, abogados, personajes conocidos, hablan también de la dieta saludable, la cocina o la gimnasia, etc.). Bueno, y un día allí actuó una señora, alguna ingeniera de limpieza, si la llamo así :-) y presentó tendencias punteras en su especialidad. Y una de ellas fue una "nano-esponja", ya que está hecha de nanofibras que son mucho mejores que las microfibras usadas hasta ahora. Me la compré y en mi país la usaba con éxito. Y ahora me la trajeron mi madre y Markéta. Fue mi última esperanza para no tener que pintar paredes por mi cuenta o para no perder una parte de la fianza (bueno, los españoles casi todo lo pasan por alto pero a mí me daría apuro entregar la habitación en un estado como ese). Tachán. La nanofibra no falló. Le enviaré una foto como prueba. :-) Por la tarde en la web veo algunos vídeos con el imitador Jablonský imitando con perfección a los líderes electorales y descargo la peli "Šmejdi"/"Canallas" (*explico: un documental checo rodeado con cámara oculta que revela las prácticas desleales en los eventos de exposición para los jubilados - los comerciantes les obligan a firmar contratos desventajosos para comprar unos productos excesivamente caros, en realidad se trata de basura - ollas, sartenes, aspiradoras, almohadas ortopédicas, etc.), ya que no me queda tiempo para verla por la noche porque en el programa está el anhelado concierto de Dani Flaco. ¡Pero cuántas ganas tengo! Me preparo "last minute" - no sé qué pasa, ayer en el cuarto de baño estuvo cerrada con llave más de dos horas Inma y hoy evidentemente intenta batir su récord Emejota. Pero en el Café Libertad 8, un local de culto donde el concierto tiene lugar, estoy a tiempo. Y es fenomenal ya desde el principio o, a lo mejor, aún antes. Es que fuera fuma Dani Flaco junto con César Pop (en su concierto estuve en septiembre; cuando no toca solo acompaña a Leiva o como hoy a Dani). El interior es acogedor, un ambiente maravilloso que resalta con la música - ponen el disco actual de Quique González (el de ayer). Mi silla número 25 está justo al lado del escenario. Y por si fuera poco, el camarero, antes de preguntarme qué voy a tomar, me elogia mi vinilobolso. :-) Y ojo, yo, aparte de "Gracias" le digo "Un café con leche pero con mucha leche, más leche que café ¿vale?" Bueno, y antes de las diez empezaron. Y hasta el momento ha sido mi concierto más hermoso. ¡¡¡Fue perfectísimo!!! ¡Ha sido maravilloso! Ese ambiente, la gente, Dani con César, además, volvió a actuar también ese frontman de Los Madison. Dani Flaco tiene unas canciones estupendas, me encantan también por el aspecto musical y en combinación con su voz es una delicia. Y entiendo también sus letras y su narración entre canciones individuales, pues qué más podría desear. Dudo si traducirle algo para que se haga una idea, ya que así, en el email podría parecer un cerdo del máximo nivel. :-) Por ejemplo, una empieza con palabras: "Ni el recuerdo de tu cara entre mis piernas... mi lengua de excursión bajo tu falda." lo que me recordó el hit de Leiva "Vis a vis" donde al comienzo canta "Qué bonito mirar la sombra que hacen las rejas mientras meto las orejas en el centro de tu andar." Sobre eso luego Leiva lo declaró como la expresión más poética sobre el sexo oral en la historia de la música. La letra la puso un amigo de Leiva y a él le gustó tanto que de eso hicieron una canción completa. Pero volvamos a Dani. Si debiera mencionar alguna anécdota suya, pues nos contó cómo el otro día andaba por la noche a casa por la famosa calle Montera (una analogía de E55 o Perlovka checas) y le paró una señora aburrida muy pintada y vestida "justo estando de servicio" si se puede llamar así, y le preguntó "¿Quieres follar?". Y él nos dijo que le había respondido "Oye, más que tú...". Lo escribo solo para que usted por fin tenga alguna idea de qué vocabulario domino gracias a esa música española y cómo de trágico es arreglar con él asuntos oficiales o escolares o hacer las compras en el mercado. :-) Del concierto me voy a la medianoche convencida de que sus próximos dos conciertos aquí en el Libertad (noviembre y diciembre) en ningún caso me los perderé. En casa enseguida descargo del Youtube algunas canciones suyas y busco sus discos. Los tengo que tener a rajatabla.
el jueves 24 de octubre:
Ese café -aunque mezclado-, canciones de Dani ajustadas para la reproducción indefinida y mi estado de ánimo excitado por el concierto, por fin, me permiten acabar de escribir y enviarle el megaemail número ocho (sí, por eso lo recibió usted a las cuatro y media de la mañana :-)). Luego por fin me digné a ir a la cama la cual abandoné con éxito después de las once (de la mañana, ¡eh!) y gozaba del segundo día de la huelga. Por motivo de la adversidad del tiempo o por la falta de interés de conocer Madrid bajo la lluvia, siendo optimista, declaro el día de hoy como vago. Lo paso sobre todo delante del ordenador - descubro una canción chula de Vikxie (ese primo de Leiva que estaba tan pasmado de mi bolso de vinilo), luego una de Quique (ese amigo de Leiva que también estaba pasmado de mi bolso de vinilo). Esos paréntesis los escribo para que usted se oriente y tenga idea de quién es quién pero después de releerlo pienso que probablemente consigo lo contrario. :-) Pues, nada. Solo quiero decir que esa canción de Quique me encanta, la busco en ese nuevo disco y descubro que está en ese primero de todos del año aprox. 1999 que tampoco todavía tengo. Luego me compro las entradas. Una para el concierto del cantautor Marwan, en Youtube llamó mi atención, da un concierto en la Galileo donde tengo esa mesita "mía", o sea, no lo dudo. Bueno, y también, por fin, están en la venta las entradas para el próximo encuentro "El poeta lee al poeta". El primero fue con Joaquín Sabina y Benjamín Prado, esta vez puedo esperar con ilusión a Luis García Montero al que conozco solo de oídas de - qué sorpresa- Leiva. Y también tengo una charla con Inma y sobre todo con Begoña sobre la huelga (bueno, qué balbuceo y tartamudeo otra vez demostré, pero ahora usted ya sabe el porqué, con mis conocimientos básicos :-)). Después veo "Výměna manželek"/"Me cambio de familia" y acabo bebiendo una botella de vino. Sí, lee bien... yo aquí, de algún modo, me pimplé en dos días ese Verdejo de Klára. Hace frío, entonces lo hago para calentarme (bueno, por lo menos, de esto intentaba convencerme :-)).
el viernes 25 de octubre:
El día de hoy lo disfruto a tope, hace una semana que duermo de maravilla – gracias al antifaz que mi mamá y mi hermana me trajeron. Por fin, cuando quiero regular la luz en la habitación, no tengo que salir de la cama y tirar de las persianas, además, tras la puerta entra la luz del pasillo. Ahora solo muevo el antifaz como quiero. ¡Qué compra tan genial! Después de abandonar la cama con mucho esfuerzo, gozo del piso vacío hasta el momento que descubro que en la habitación opuesta de Begoña estuvo durmiendo todo el tiempo su amiga Nuria. Bueno, ¡qué divertido, eh! Un momento ideal para esfumarme con rumbo a la embajada, ya que hoy es ese famoso día cuando por primera vez en mi vida votaré en la embajada checa en el extranjero. Aaaaaah. Como necesito sacar pasta para el alquiler y reciclar la basura, voy por el Retiro hacia el barrio Goya, con la idea de que allí encontraré un cajero y también un autobús oportuno. Sí, como el tiempo no es nada especial, a cada rato llueve y yo estoy algo constipada, al final elijo el transporte público (¡¡¡pero debido a esas jodidas clases!!! ¡¡¡donde hacía un frío que pela!!! ¡¡¡con eso mis conciertos no tienen nada que ver!!!). La verdad es que el metro circula allí también, pero no pago por mirar desde la ventanilla a la oscuridad o a la estación. El Retiro después de la lluvia huele maravillosamente y yo ando por los senderos abandonados. Por qué todos los demás van por el camino principal cubierto de hormigón lo tengo claro después de mirar a mis nuevos zapatos. Creo que en la embajada sabrán enseguida que soy de Chequia, sin tener que presentar el DNI. Hostia. Bueno, pero yo intento no estar a la vista de los otros a propósito – sí, Horská otra vez hace algo que ningún español hace andando y ella misma le escribió que lo dejaríá desde noviembre. ¡Y todavía no es, ja! O sea, después de volver a jalarme otro paquete de galletas Príncipe, saco el dinero (aunque ese hijoputa me permitió solo 300 euros, ¡cómo odio esos bancos!) y enseguida encuentro la parada del bús desde donde en un momento salgo. Y durante el camino me doy cuenta de que de Madrid la conozco de verdad poco. ¡Es imposible recorrerlo todo para enero! Cuando bajo en la parada, dudo un poco por dónde ir pero por casualidad va frente a mí una cara conocida. Imagine usted, es esa señora de la portada de la revista que me trajeron mi mamá y mi hermana – la directora del Centro checo de Madrid. Ja. Estoy bien aquí. El edificio lo encuentro inmediatamente después. Voto en un momento y regreso a la parada. Dejó de llover, así que un momento coqueteo con la idea ir a pie pero reconozco que tengo que cuidarme en cuanto a la salud y sobre todo, cuando llego a saber que puedo ir con otro bus, o sea, por otra ruta, está decidido. Voy con el 150 hacia la plaza central – Sol. Allí me dirijo a la FNAC y a El Corte Inglés a mirar si tienen aquellos discos de Dani Flaco. No los tienen. Por desgracia para mí, por suerte para mi tarjeta de crédito/débito. En casa repaso servidores de noticias en cuanto a las elecciones y me entero de que Tomáš Klus (*explico: un cantautor joven y talentoso, letrista, compositor y actor checo) cambiando su foto de pérfil en Facebook en verde se manifestó para apoyar y elegir a nosotros, los Verdes. Gracias a él me recuerdo de usted y termino de escribir el megaemail número nueve. Y luego preparo la cena – risotto tahini. Bueno, y cortando la verdura luego, de repente entre la zanahoria y el brocoli cortados totalmente me quedo inmóvil. ¡Por Dios, "DESPUÉS DE"! Yo le dije a Quique González que en mi nombre se escribía y griega, sin embargo, utilicé la preposición de tiempo – "después de te" en vez de correcto "detrás de". Hostia, yo ahora parezco una idiota total. Uaaaaa. Qué ridículo. Nooooo. Socorrooo. Ay, pobrecito, pues por eso estaba tan confundido e intentaba hacer y griega de la i latina que tengo detrás de erre. Paso de eso. No. De otro modo. ¿No querías un reto? Pues, tienes que luchar, chica. Quizás Leiva tenga una firma de disco también y gracias a este lapsus ya no te equivocarás. Así que llamo a casa y quiero que me envíen de mi ordenador la publicación Mluvte jako mluvčí / Hable como un portavoz. Es que ese es un libro especial (en formato electrónico) lleno de terribles, pero igual terriblemente importantes, ejercicios para desarollar el vocabulario activo, que es justo lo que necesito. Como en el prólogo de la publicación se dice: la gente con un vocabulario rico pero pasivo, a menudo muy educada, falla al hablar y se lo cepilla incluso el feriante más tonto, ya que él habla por los codos desde la mañana a la noche. Ya es hora a empezar. Pero ¡vaya! Mi madre no es capaz de poner en marcha mi notebook. Simplemente no arranca, así que yo me acuesto pensando en todo lo que he perdido en el caso de que esa chatarra de alguna manera extraña no encienda.
el sábado 26 de octubre:
Bueno, termino ese email número nueve y voy a dormir. Cuando me despierto escribe mi mamá. Dice que el ordenador no estaba en el enchufe. ¡¡¡Hostiaaaa!!! No se enfade conmigo usted - yo no quería ofenderles, así que ayer pregunté SOLO UNA VEZ si el cable estaba conectado a la electricidad y ellas me asintieron. Pues nada, todo está bien. Uf. Pues, le explico a mi mamá de dónde hay que enviar lo que necesito, sin embargo, antes de eso – por si no fuera poco con esa adrenalina – pienso sobre la contraseña a mi cuenta en el notebook. Pero también eso se resuelve, entonces después de un momento aparece en mi email aquel "Portavoz". Pues desde noviembre empezaré con él. Eso es, creo, una fecha ideal – desde el 1.11. terminaré de atiborrarme de galletas Príncipe y comenzaré a nutrir esa parte del cerebro que es responsable del vocabulario activo (esta expresión la leí en el prólogo del libro, como diría nuestro Asperger "¡Y ahora cito!" :-)). No quiero posponerlo a propósito pero hoy ya tengo la agenda llena – por la noche voy al concierto de Dani Martín (por favor, no confundir con Dani Flaco, ¡eso sería un error fundamental!). Preparo mi comida, además me da un pincho de tortilla Clara (=mamá de Inma y Begoña) – durante el fin de semana estará aquí con nosotras, lo que yo aprovecho y le entrego el dinero, el alquiler de noviembre) que – según el contrato- quiere cada quinto día del mes. Bueno, y ella se sorprende de lo pronto que lo tengo para ella. Sabe, eso será un resto de Austria-Hungría en nosotros. La puntualidad siempre en primer lugar. El resto de la tarde la paso investigando el sistema de transporte público de Madrid. No sé, aquí según parece no existen buscadores en los que uno pone de dónde adónde quiere ir y la aplicación inteligente ya se encarga de eso. Ese concierto tiene lugar en "el quinto pino". No, no es el nombre, sino que es el primer modismo que aprendí aquí y ahora con alegría (o mejor, con rabia) lo puedo usar. "En el quinto pino" se traduce al checo como "en un lugar muy lejano", "en Prčice" como decimos nosotros. :-) Se trata de la penúltima parada del metro de la zona B1 Reyes Católicos, totalmente a las afueras de Madrid – la ciudad pequeñísima San Sebastián de los Reyes. No tengo ni idea de cuánto tiempo dura el camino ni qué billete hace falta comprarme. Y que el metro probablemente circula solo hasta la una de la mañana, pues yo no sé cómo regresaré a casa, eso me lo callo. Además, el concierto tiene lugar en un anfiteatro y aquí parece llover, yo constipada y ya ni menciono en absoluto que existía aquella posibilidad de ir en el centro de Madrid a la Riviera donde en el mismo tiempo arrancará el concierto –ya agotado- de Iván Ferreiro. Sí, de ese tipo cuyo disco me lo compré a tiempo pero como Horská no lloró, no mamó – la entrada para el concierto, para los primeros propietarios del disco, esa dama, ya no se la llevó y así perdió la posibilidad de vivir el concierto de Iván por lo menos una vez y en una fecha diferente. Cuando me voy, en el piso están todos excepto Emejota. Y justo ella que es la única que –cuando les digo al concierto de quién hoy voy- en vez de las caras largas empieza a gritar con entusiasmo qué suerte tengo. A decir verdad me interesa más la música de Iván Ferreiro, pero yo la entrada para el conci de Dani Martín me la compré en la mitad de julio cuando no sabía en absoluto (Leiva diría "No tenía ni puta idea eh") que aquí tendría un concierto tras otro y pensé que qué ganga había hecho con esa compra. Bueno, y acerca del propio Dani: antes actuaba como frontman del grupo El Canto del Loco, muy popular entre los adolescentes, unos diez años atrás. Y yo cuando hace unos años empecé a rebuscar qué de verdad escuchaban los españoles jóvenes (los libros de texto de español presentan solo Shakira y Enrique Iglesias) encontré justo los hits de El Canto. Así que por el sentimiento que es lo primero, de verdad puro español, que alcancé... hace unos cinco años se desintegraron y emprendieron una carrera en solitario. A Dani le influyó cuando murió su hermana súbitamente. No se trata de ningún sentimiento exagerado, esas dos canciones que le escribió (*Mi lamento y El cielo de los perros) son preciosas. Pero él ahora está enfocado en otras canciones sobre qué bonito es el mundo, que hace falta disfrutarlo, cómo está de agradecido por todo pero todo es... no sé... demasiado ostentoso. No lo pienso mal, algo de él me gusta pero el resto ya no me dice nada. Pero bueno, para una vez... o sea, voy. El billete del metro me lo compro bien y con un transbordo me esperan unas diecinueve estaciones. ¡Y qué me pasó! Voy, voy y de repente una señora que está sentada al lado de mí pregunta asustadamente si no sé cómo se llega al Montecarmelo. Yo echo un vistazo al plano del transporte público y digo "Justo en la próxima parada" (al pronunciarlo además lo renombro en Montecarlo). Pero ¡narices! Es que el metro va solo a la estación Tres olivos y allí hace falta pasar a la conexión que continua. Pero de eso casi en ningún lugar se entera uno. Y lo más chistoso es que yo no noté en absoluto que el tren estaba volviendo conmigo en la dirección contraria y seguía descontando "listamente" las estaciones. Si no fuera por esa señora, por poco hubiera llegado de verdad al concierto de Iván Ferreiro. :-) Cuando salí con éxito del metro de la estación Reyes Católicos, llegué a saber que en todas partes hay oscuridad y yo en ningún lugar me encontré con esas muchedumbres que seguramente a este concierto – también agotado- iban a acudir. Es que como viajaba en metro de aquí para allí, iba con un poco de retraso y la mayoría de la gente ya había estado en el lugar. Pero luego me oriento y en unos minutos presento mi entrada a los guardias. Los chicos además quieren ver el bolso (hoy dejé mi vinilbolso en casa) y ¡anda! La botella con la bebida. ¡Fuera con ella! Tsss. No. Que me privaron de una botella pequeña y práctica no me importa. ¡Pero ese cerdo la echó a una basura no separada! Además, con el vinilobolso tengo la experiencia de que el hombre nunca sabe por dónde se abre, así que lo dejan. Pues, nada. No voy a malear la noche y voy a buscar algún sitio. Estoy sentada estratégicamente al margen desde donde pienso salir corriendo al metro a tiempo porque creo que el concierto no durará tanto tiempo. Después de las 21 empieza. El escenario es enorme, en todas partes hay masas de fans entusiasmados. En cuanto al concierto – en breve: cantó las canciones que me encantan (por ejemplo "Puede ser" con Amaia Montero), luego las que no me gustan tanto y también las que no me dicen nada. Pero de todos modos fue una experiencia con E en mayúscula, además no cayó ni una gota y el concierto terminó antes de las once y media. Corro al metro sobre todo con la visión del calor porque aquí me congelé bien. Todo enlaza perfectamente, así que a las doce y media estoy en el piso.
El resto ya es domingo y pertenece al once y lo vivo ahora, el retraso está recuperado. :-)
Saluda
Kristýna resfriada desde Madrid
Ya solo fotodocumentación para el megaemail n°10:
Envío la foto de la firma de discos de Quique, incluso del disco firmado; esa pared "blanqueada" :-); el concierto de Dani Flaco – es ese a la izquierda de las gafas y del sombrero, a su derecha está sentado César Pop (se parece un poco a nuestro David Suchařípa :-) ( *explico: un actor checo); sí, la botella con vino sin vino, o sea, de vino; la foto del Retiro – los árboles plantados a las víctimas de los atentados del 2004; la embajada checa; risotto tahini; la estación del metro Reyes Católicos – todas son muy bonitas aquí en Madrid; y las fotos del concierto de Dani Martín – esas tres que están sacadas desde lejos. También envío la foto de Dani Martín – para que se haga una idea.
K.
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