En mi universidad madrileña funciona una cosa ingrata: de los estudiantes se exigen actividades no solo en las clases sino también en casa. La de casa uno tiene que redactarla y a tiempo ponerla en la web. Los deadlines suelen ser a la vuelta del mes. Con eso disculpo mi pausa. El paso de noviembre a diciembre lo consagré a los deberes asquerosos y eso lo pagaron mis más queridas – la Alcalá y los megaemails (¡y casi los conciertos!). Bueno y ahora rápidamente a enlazar con el quince cuando todavía noviembre no tocaba a su fin y yo estaba para bromas.
el jueves 21 de noviembre:
Cuando me despierto controlo el Twitter por si el día de ayer, o sea, el agradecimiento público de Leiva por mi carta, no fue solo un sueño. Parece que no. Me divierto leyendo los comentarios: una chica dice que la escribió ella (jaja, si hubiera tenido la idea de que la autora es checa), otra dice que componga una canción inspirada por la carta, Tuli (su saxofonista) y otro compadres se cachondean de él – dicen que entró en la tienda "a tomar un mosto, vio una carta en el suelo y la pilló", que era una carta de segunda mano, etc. :-) Luego, no me paro – Káča (esa entusiasmada maestra de Praga que ahora tiene la clase de tercer curso) escribe novedades de Praga, después leo un email del cine donde me preguntan si puedo ir a la proyección del lunes de la película Temporal en vez del sábado. Respondo "Nigún problema," el lunes me viene mejor (los sábados pertenecen a Alcalá y si fuera al cine me privaría de ella ¿eh?). Por la tarde le escribo a Anita (a esa madrileña de París a la que conocí gracias a Leiva). Cuando lo encontré por primera vez, aludí a eso delante de las chicas en el piso y luego también con Anita, ¿recuerda? Todas me comíais el coco con que la próxima vez lo parara, y la que más fue justo Anita. Le expliqué que pararlo con el fin de decirle que yo soy su fan de la República Checa, que aquí debido a su disco está fingiendo interés por el estudio, sería embarazoso porque él probablemente ya lo sabía. Simplemente lo dejé escapar inadvertidamente y luego tuve que aclararle ese desliz mío de junio con la carta. Mientras que yo me regañaba y lamentaba, ella me consoló y enseguida añadió que había sido una idea guay y si esa carta la había recibido seguramente le había alegrado. A eso me opuse diciendo que justo era eso – que no tenía ni menor idea de dónde terminó la carta y por eso a Leiva, si lo encuentro algún día una vez más (jajaja), no pienso molestarle. Punto. Bueno, y ahora, después de un mes de esa charla, le escribo si notó lo que ayer Leiva había escrito en su Twitter, que yo alucinaba. Respondió que no, pero que él de vez en cuando escribe allí, ¿no?; los tuites terminados con la letra L son de él, por qué estaba sorprendida por eso; un momento, iba a echar un vistazo allí. A los treinta segundos me responde: "¡¡¡¿¿¿No me digas que es tu carta???!!!" Y enseguida me manda otros cinco mensajes. Está totalmente pasmada por eso, dice que es una pasada de verdad y un detallazo de él que lo haya puesto en su Twitter. Y que le conteste (lo que, naturalmente, rechazo – mi nombre o cualquier otra cosa con aquel agradecimineto mío en la carta no tiene nada que ver). Se alegra muchísimo por mí y dice que lo disfrute. Hostia, soy la única en toda la galaxía que sabe con ese recado lo que Leiva quiere decir... sí, y también soy la única en toda la Vía Láctea que sabe cuántas faltas y sobre todo tonterías aquella vez había escrito allí. De hecho, ¡ojo! ¡Si Leiva ya lo sabe también! Esa carta de verdad le llegó a él... y él además la leyó de verdad... uaaaa. Pues nada. ¡Rápido! a la clase y por la noche - el concierto de Dani Flaco (=el cantautor Cerdo). En él estuve hace un mes. ¿Sabe usted lo que significa? No solo que el tiempo pasa volando terriblemente, sino también que yo en el día de su concierto hice la limpieza general. Y algo me dice (por ejemplo esa capa de polvo) que no estaría de más repetir esa acción. La clase – o sea, Psicología del Aprendizaje, – un coñazo. Además, desde el próximo jueves, antes de ella tendré noventa mínutos más de Didáctica. Ese fin de noviembre, cuando empiezan las clases para el grupo B, ha llegado algo rápido. De la facultad voy a la parada del autobús. Sí, hace bastante viento, así que se me ocurrió hoy coger el bus, especialmente si tengo ese concierto. Espero, espero... treinta, cuarenta, cincuenta segundos. ¡Y basta! Hostia, si no va enseguida, entonces que se vaya al cuerno. El metro lo evito porque igual que soy holgazana para esperar el autobús, en este caso me disuade imaginar cuántas escaleras al subterráneo tendría que bajar. ¡Narices! Al piso me dirigí andando. Igual que Leiva, no logró convencer a cierta chavala de que en la canción Eme canta "Meneaste las caderas." en vez de su presupuesto "Me measte en la escalera." aunque Quique González haga lo que haga su hit "La ciudad del viento" es de Madrid. Punto. Sin discusión. A pesar de que el otoño está avanzado seguimos teniendo días soleados pero ¡qué viento! Por cierto, gracias a Quique conozco para él varias expresiones, en sus canciones aparece sobre todo la palabra PONIENTE (=el viento del norte). Sí, es que Quique es una alma romántica nacida en el signo de Libra. No se puede comparar con el vocabulario sensual de Tauro de Leiva. :-) Le digo, a casa llego tan cansadísima y fastidiada de esas clases malditas, y tan entumecida por esa ciudad airosa que un momento coqueteo con la idea de no ir al concierto. Si Dani tiene otro en diciembre. Pero al final, me sobrepongo y salgo. Y en cuanto pulsa la guitarra y arranca me digo: Yo, idiota, quería estar metida en casa. Por cierto, ese apodo mío "Cerdo" no se lo merece, es erroneisísimo. Vuelvo antes de la una de la mañana, las escaleras las subo pisando la parte delantera de los zapatos de tacón para que el taconeo no despierte a toda la casa. Ay, qué conciertazo y noche maravillosa...
el viernes 22 de noviembre:
Día libre. Hoy está sobre el tapete arreglar los asuntos pendientes y por la noche ("para variar") un concierto. Los chicos de Burgos (el grupo LA M.O.D.A) actuaron en el mítico club El Sol. Mi primer concierto aquí en el que no estuve sola – fue conmigo Marcelka. Sin problemas enlazamos con la charla del cine. Nos molestan terriblemente los fumadores, los caracoles (es decir, los españoles que caminan más lento que nosotras dos, es decir, 95% de los españoles) y las españolas flacas (es decir, 95% de las españolas) – no entendemos en absoluto cómo pueden ser tan delgadas si todo el tiempo van de un bar y restaurante al otro. Verdad, probablemente sea por esas raciones. Una barra de pan no se la jalaría de un tirón ninguna, mientras que Marcelka y yo, sin problemas. Pero ¿¿¿cómo es posible que no estén constantemente hambrientas??? Un misterio. Por el contrario, alabamos esa sensación de seguridad, Madrid vive 24 horas al día y a tipos sospechosos casi no los encontré. El concierto fue genial. Habiendo comprado una entrada más cara, recibí automáticamente con ella también el disco. Ya tengo muchas ganas de ponerlo en febrero en casa, sin embargo, con la actuación en vivo no se puede comparar. Eso es simplemente una pasada. A los chicos los descubrí por casualidad gracias a mi primer concierto madrileño (un día después de llegar), era un evento de caridad lleno de nombres famosos. Ha sido una honra para mí vivirlos por segunda vez. A Marcelka durante el concierto le molestó algún importuno, no obstante, ella para divertirse se comunicaba animadamente con él. Pues, yo a su amigo le rebatí enseguida. No pienso estropearme la noche ¿eh? A casa fuimos una parte del camino juntas, nos separamos en la plaza de Antón Martín diciendo que íbamos a quedar el domingo – pensamos ir al cine y esa Filmoteca donde echan la película está justo en la calle de al lado.
el sábado 23 de noviembre:
Un día libre+cualquier clima=Alcalá. Antes de salir, como bien, para en el marco del ahorro, resistir sentarme por las cafeterías. Un comentario al margen: por favor, que alguien diga a Horská que si quiere tomar esos mijos dulces (esos para los que no tendría que perder el tiempo preparando una verdura estofada y solo echaría en ellos coco rallado, almendras y uvas pasas si tiene prisa) que la próxima vez no los sale. Fue un asco y el mejor modo de evitar la sal o la versión dulce para siempre. De camino hizo un tiempo maravilloso, así que hice fotos frenéticamente, sobre todo en el parque Capricho, donde el otoño estaba en plena actividad. Lo recorrí por completo. De camino a casa no me entraba en la cabeza cómo esas españolas lo hacen que – aparte de ser tan delgadas- son tan hermosas también a cinco grados sobre cero mientras que yo tengo la nariz fría, que me sobresale de la cara, aparte de esto, camuflada con la bufanda y con el gorro. Caí en la cuenta de que si fueran andando 20 kms estarían igual que yo. ¡Pero ellas hacen 20 metros del taxi a la tienda y esa es otra! De mis reflexiones en la Ciudad Lineal me interrumpe una señora preguntando si sé donde hay aquí un centro comercial. Debe de ser ese megaedificio detrás del rincón. Se lo comuniqué enseguida y con alegría, la verdad es que nunca estuve allí pero como decimos en checo - la calle de Alcalá voy conociéndola como mis propios zapatos (*explico: el refrán "conocer como los propios zapatos" se utiliza cuando conocemos a alguien o algo con mucho detalle). Por cierto, ellos me rescinden el contrato y se descomponen. No sé si no debería ir a reclamarlos. ¡Si los llevo utilizando solo un mes! Por otra parte, reconozco que lo que experimentaron conmigo durante noviembre, lo andarían en diez años con otro dueño. Pero volvamos a esa dama. Mi euforia la cambió un shock que ni después de tres meses soy capaz de formar una respuesta correcta para que después pueda llenarme de orgullo de que, de hecho, soy una estrella. Explico: para "ROH" el español tiene dos expresiones – el interior, en una habitación es "el rincón", el exterior es "la esquina". Bueno, y Horská, por supuesto sin pensarlo de cualquier manera, a aquella dama se lo dije utilizando "el rincón". ¡Pero ahora ojo! A la vuelta de esa esquina está esa cadena de tiendas con golosinas (donde también me prohibí entrar jamás) que lleva el nombre de "El Rincón" y con respecto que en la respuesta oral no se reconoce la letra mayúscula o minúscula, ¿significa que? Que Kristýnka es simplemente una chula, querida dama, yo tenía en mente el rincón con erre mayúscula. :-) Pues, de la columna gramatical es todo por hoy. Pasemos a algo peor. Sí, Casa del Libro. Así como le juro a usted ahora que ese libro de texto para la conversación lleno de materiales perfectos y el segundo especializado en expresiones coloquiales no los podía dejar allí, de igual manera mi tarjeta de crédito me comunica que -como en checo decimos- "donde nada hay, ni la muerte lo tomará". Pues no, literalmente. Espero que mi pausa no le haya asustado que me había pasado algo malo. Por otro lado, si mi demora va a repetirse también en la próxima semana, entonces sí, morí de hambre. Pero esos libros de texto, desde el punto de vista de la didáctica y de la utilidad, no tienen ningún fallo, de verdad; con las tripas sonando pienso a quién podría legarlos.
el domingo 24 de noviembre:
Lo que le dije ayer de que estaba sin blanca era un poco exageración. Después de hoy, en ningún caso. La razón primera: Xoel López tendrá un concierto el 23 de enero y sería uno de los pocos a los que debido a unos cuantos euros (ejem, aproximadamente unos veinte, a ser exacta) me lo perdería. Y eso no puede ser. Y seguramente será mi último concierto madrileño. Entonces no se hable más. Bueno, y la razón número dos: el domingo (no, el cine está sin culpa, las entradas en la Filmoteca no cuestan ni tres euros) cayó la actuación de Vikxie (=el primo de Leiva que había alabado tanto mi vinilobolso) en la FNAC. El concierto acústico de una hora fue gratis. Pero ese disco suyo que quería que me firmara ya por supuesto no. Fui a por él a El Corte Inglés de enfrente, porque allí costaba un euro más barato. ¿Sabe usted qué es un euro? Son dos barras de pan. ¿Sabe usted qué son dos barra de pan? Es mi comida para dos días. Como resultó, fue de mi parte una jugada muy sagaz, ya que en la FNAC no solo era más caro, sino que dicen que durante el concierto ni lo habían tenido. O sea, me quedaría sin la firma y sin el disco (bueno, y sin el hambre). De esta manera, ahorré y además recibí el recibo con un cupón de descuento para el departamento de música que caduca al final del año. Hostia. ¡No puedo dejarlo expirar! En cuanto al concierto de Vikxie – estaba felicísima: por una parte – el concierto se celebró en un lugar que hasta ahora lo conocía solo del Youtube, estaba sentada en la sala llena de españoles por la que se extendía música y que me encanta, y la interrumpían sus anécdotas. Por ejemplo, de cómo tocó en el extranjero (se refería a Cataluña que quiere separarse de España), luego añadió "Gracias, en Barcelona no se reían así.", lo que provocó lógicamente una risa aún más grande. :-) Estaba en el séptimo cielo, aunque después tenía ganas de lloriquear cuando me di cuenta de que ya estaba en la segunda parte. Voy entendiendo poco a poco que la oportunidad de ver a todos mis queridos cantantes tiende hacia el final. Y como si lo hiciera a propósito, acabó con mi canción favorita, su hit "Si te marchas (de Madrid)"... pero lágrimas aparte, seguía la firma de discos. Por favor, ¡pido fanfarrias! ¿Sabe usted como había escrito que tenía curiosidad de quién sería ese suertudo al que ya por fin diría correctamente "con Y griega detrás de T"? ¡Tachán! ¡En el Salón de la Fama entra Vikxie! ¡Y ojo! Le interesó saber de dónde era y cuando respondí que de la República Checa me dijo que tenía muchos amigos entre los checos (desde su estancia de diez años en Inglaterra), sin embargo, en checo sabe decir solo "JAK SE MÁŠ?"(=¿Cómo estás?) y "KURVA" (=puta). ¡Hostia! Yo me quedé boquiabierta. ¡Un español y lengua checa! Me pasmó tanto que ni se me había ocurrido añadir que yo gracias a sus primos (Leiva y Juancho), por el contrario, soy capaz de decir con varias expresiones españolas lo que una KURVA tiene a su cargo. Y por cierto, todavía haciendo la cola, cuando Vikxie se dio cuenta de mi vinilobolso, enseguida empezó a golpetearlo y decía que el bolso molaba de verdad. Y además me elogió que hubiera llevado – a diferencia de los fans anteriores – para la firma de discos un rotulador. Y esta noche maravillosa no estaba terminando. De la FNAC salí corriendo a las ocho y media, pasé rápido por el piso a cenar y corrí al encuentro y al cine con Marcelka. Vino mascando galletas TUC y me tuve que reír – si echo mano a por algo salado en el chino es justo esto. De verdad, nosotras somos como gemelas. En la Filmoteca echaron "Odcházení"/"La Retirada" de Havel. Hace mucho que quería verla y con gusto compararé el checo con los subtítulos españoles. La primera proyección que había abierto a principios de noviembre la serie de películas europeas la aplacé para hoy debido a la agenda llena. Para las soluciones "geniales" tengo cabeza. Menos mal que puedo confiar en mis piernitas que siempre a tiempo me llevan a pasos agigantados a donde hace falta. Gracias a ellas logré asistir tanto a la firma en la FNAC como a la película en la Filmoteca. Piernitas, ¡sois mis princesas! ¡Me quito el sombrero ante vosotras! Con Marcelka, a la que envidio un abrigo caliente y botas altas, me puse de acuerdo en encontrarnos el próximo viernes – quiere llevarme a un centro comercial del que tiene esas chulas prendas. A casa llegué con un humor estupendo. Después de examinar la web de Vikxie, le comunico a usted que mis últimos ahorros los sacrifiqué para la entrada de su concierto de diciembre. ¡Si él es tan amable y espontáneo! Mi cuenta bancaria está en contra de mí, mis tripas suenan, la temperatura baja, mi termorregulación se enfada, mi pulgar va a teclear un mensaje a Marcela diciendo que las compras las cancelo, pero creo con firmeza que, por lo menos usted, me entiende...
el lunes 25 de noviembre:
Lunes, o sea, Qué de nuevo hay en la Psicopatología. Bueno, las curiosidades sobre los trastornos que se las lleve el diablo. El Hablador coronó la clase de hoy anunciándonos que el test cuya fecha no es capaz de influir de ningún modo lo haremos el 3 de febrero. Sí. Tengo el contrato de alquiler, el seguro, el billete de avión y la vivienda solo hasta el 31 de enero. Jajaja (pero solo entre nosotras, si Leiva piensa publicar el disco a la vuelta de enero, febrero es un triunfo convincente para mis padres de por qué tengo que prolongar mi estancia aquí de una semana). O sea, una complicación que te cagas, pero acaso la agradezca. De camino a casa me esperaba uno de los paseos más bonitos que he vivido aquí. La señora Horská ya por fin toma en consideración que no estará aquí para siempre, así que su "Por allí iré la próxima vez." cambia a "Por allí voy hoy." Concretamente fui tras un parque cerca de Moncloa, el Templo de Debod, los jardines de Sabatini al lado del Palacio y por el viaducto desde donde fui a echar un vistazo al cine en el que me espera esta noche la película Temporal. Después de llegar a casa, escribo con prisa la postal para Káča (esa maestra de Praga) que le prometí enviar, lo que me lleva a la pregunta: ¿Qué postal quiere usted? ¿Le interesó algún lugar de los que había escrito en los mails? No me torture y me haga elegir algo a mí. Si sabe qué desesperación me produce cualquier elección. Bueno, y en cuanto al cine – diciéndolo en una palabra: ¡maravilloso! La entrada por tres euros, una sala acogedora con la presencia del director y algunos actores, una película que describe un día de la gente en un trabajo que hacen solo por dinero o para ganarse la vida, que se balanceaba entre el drama y la comedia amarga. Como si se rodara en nuestro país. Una delicia. Y Leiva, aparte de que compuso la línea principal de la música y al final de ella resultó también la canción, incluso apareció en la película en el papel de un cantante callejero (junto con César Pop). Aaaaaaaaa... mejor conclusión hoy no podía desear. :-)
Saluda
Kristýna desde Madrid (y si -rodeada de discos, entradas para conciertos y de libros- no murió de hambre, le saluda hasta hoy. Y el siguiente megaemail lo enviará, con retraso, pero lo enviará. :-))
Las fotos atrasadas para el n° 16.
Envío la foto de Leiva de la película Temporal; de Anita (madrileña en París); de Dani Flaco (=el cantautor Cerdo) en Libertad; el grupo LA M.O.D.A en el club El Sol; yo de camino a la Alameda :-); el otoño en el parque Capricho; el concierto de Vikxie en la FNAC – no era posible tomar una foto de él, ya que estaba mal iluminado; el disco firmado ("Para Kristýna con K, Y y con acento. Mil gracias. Vikxie."); la Filmoteca – el CINE DORE donde echaron "Odcházení"/"La Retirada" de Havel y el parque al lado del Palacio Real.
K.
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